Salón de Retratos



Este salón recibe el nombre de la serie de retratos que cuelgan de sus paredes, aunque ninguno corresponde a la familia imperial quiteña sino, por el contrario, a otros monarcas extranjeros importantes, entre ellos el emperador Carlos V (España y Sacro Imperio), la emperatriz Eugenia de Montijo (Francia), Isabel de Castilla y Fernando de Aragón (España), Elizabeth I (Inglaterra), Luis XIV (Francia), Napoleón I (Francia), Carlomagno (Macedonia), Pedro I (Brasil) o Agustín I (México).

 

De líneas limpias y decoración austera, destaca la gran mesa de caoba que era utilizada para presentar los obsequios que llevaban a la emperatriz Mariana, quien daba sus audiencias de los domingos en este espacio, sentada en el sillón que se encuentra al final de la galería. También servía como antecomedor, un espacio en el que los invitados a las comidas y cenas de gala esperaban a ser llamados a la mesa.

 

Las consolas fueron encargadas exprofeso para este espacio en el Taller de Quito, del convento de San Francisco; mientras que la lámpara fue parte del lote adquirido en Austria para iluminar el nuevo palacio en 1835.